MENSAJE DE LA SANTÍSIMA VIRGEN MARÍA
“ Pequeños de Mi Corazón, amados hijos: Os saluda y bendice vuestra Madre María, la Inmaculada Concepción y siempre Virgen, de la mano del Padre, de Mi Santo Hijo y del Dulce Espíritu de Dios…
Hijitos amados: Alguno de vosotros ha pensado que tal vez podría navegar sobre un pétalo, dejándose llevar por la brisa… Primero, qué ocuparía como pensamiento vuestra razón, qué en un pétalo no cabría ni vuestro corazón, hijitos amados, pero como navegar sobre un pétalo sobre los océanos de Misericordia puede vuestro corazón cuando sus puertas ha abierto a la Gracia… Un alma que a Dios se ha entregado, dócil a El, fácilmente por la brisa del Espíritu se deja llevar sin temer a donde va a llegar, pues el corazón que en Dios confía, bien sabe que es El providente y conoce mejor que el hombre mismo, sus necesidades…
Hijos: Si verdaderamente hubiese confianza en vosotros, más que una oración de petición la que aquí realizáis, debería ser una oración de acción de gracias, pues vuestro corazón bien sabe que Dios le otorga lo que para su salvación necesita, más lo que vuestra petición debe llevar, es ese deseo de poder cumplir con cuanto pueda llegar para agradar y así vivir la Divina Voluntad…
Cuanto tiempo Mi Amado Hijo en el desierto y a Dios ¿Que pidió?… Hijitos: Y siendo El verdadero Dios y Hombre, en aquel momento intenso de oración ¿Cuanto aquél que la gracia perdió, al Rey de Reyes ofreció ?… Estad atentos, hijos amados… ¡Estad atentos!, pues aún en la más profunda oración una sombra puede llegar a vuestro corazón… Más si verdaderamente estáis en las manos de Dios y en El confiáis, esta sombra poco a poco se desvanecerá…
HIJITOS: HOY OS INVITO A CONFIAR; A CONFIAR COMO EL PEQUEÑITO EN LOS BRAZOS DE SU MADRE… HOY OS INVITO A CONFIAR COMO AQUELLAS AVES QUE A LA MADRE ESPERAN CON EL ALIMENTO… HOY OS INVITO A CONFIAR EN EL AMOR DE AQUÉL QUE OS CREÓ… ¿COMO PODRÍAIS DESCONFIAR DE AQUÉL QUE A SU HIJO ENVIÓ Y QUE SU VIDA ENTREGÓ?…
Hijitos: Si crece vuestra confianza, crecerá vuestra fe… Y cuanto a tantos enfermos Mi Amado Hijo dijo: “ Todo sea por vuestra fe”… ¡Queréis, hijos, tanto!… Queréis paz y sociego… Queréis tranquilidad en vuestro hogar, pero no confiaís en Aquél que vida es y da… Así como Os he dicho si verdaderamente en Dios confiaran aquellos que no tienen pan, bastaría que a Jesús Sacramentado recibieran y el hambre desaparecería…
Hijos: SOLO DIOS BASTA… ¡CONFIAD DE CORAZÓN!… Yo vuestra Madre María, la Inmaculada Concepción y siempre Virgen os invito a confiar de mi mano… Os amo… Rositas Blancas para vuestro corazón… Y Jesús Sacramentado, vivo y presente entre vosotros, sea con el Padre y el Espíritu vuestra viva y eterna bendición… ¡CONFIAD Y ESPERAD EN EL SEÑOR!…”
Marzo 13 del 2.000
Casa de Oración
“Madre de la Divina Gracia”
Bogotá D.C.- Colombia
Carolina Name