Enero 13 de 2022

Hijos de mi corazón: Yo soy la Inmaculada Concepción y siempre Virgen, la Madre de Jesús y vuestra Madre… Recibid mi bendición y mi abrazo maternal en este día 13… Mirad, hijos, siempre hacia Aquél que os da la paz, que todo da, que todo es… Poned vuestra mirada en vuestro Dios, en este tiempo confuso donde muchos perdidos caminan desorientados en medio de la confusión…

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Yo, como madre, deseo la salvación de vuestras almas… Os quiero a todos, hijos míos, en el Cielo… Por eso os exhorto y os llamo a llevar una vida que dé testimonio de la presencia de Dios en vosotros; que amáis a vuestro Dios, que adoráis a vuestro Dios y que queréis ir a vuestro Dios… ¡Sed buenos niños!… Permaneced orantes, unidos y obedientes… Yo, como vuestra Madre, os conduzco a ese lugar seguro que es Cristo mismo, Jesús Sacramentado, que espera por vosotros…

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Yo os deseo en el Cielo hijos… ¿Queréis vosotros ir al Cielo?… ¡Servid!… ¡Amad!… Dejad a Cristo ser en vosotros y abriréis las puertas, poco a poco, de vuestra salvación… ¡Arrepentíos de vuestros pecados!… ¡Buscad la gracia y añorad el cielo!…

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Adiós mis niños… ¡Sed fuertes!… Vivid este tiempo abrazados a la Cruz de Cristo y, en mi compañía, en mi regazo, pues no os dejo solos… Bendiciones… Bendiciones…”